lunes, 25 de mayo de 2015
jueves, 14 de mayo de 2015
Tendencia: ¡llegué a los 30 sin hijos!
Sí tengo 30, bueno 31 y no tengo hijos aún, y qué? como tampoco me he casado oficialmente.
Y el post se llama tendencia, porque así como tenemos una problemática nacional de madres desde edades muy tempranas, también está el otro extremo de las que hemos aplazado el tema o que ya decidieron definitivamente no serlo. Nunca me he sentido deprimida por el tema, pues he conocido casos de mujeres que se deprimen cuando se están acercando a los 30 y no se han casado ni tenido hijos.
La verdad ya me acostumbre a que me hagan preguntas como:
¿Y cuándo vas a encargar? y yo contesto: ¿encargar qué? sonriendo sutilmente
¿Y no has pensado en tener hijos? y yo respondo: no, no me visualizo aún -blanquedando los ojos-¿Pero si quieres tener? y digo: no sé, no lo he pensado
y me han dicho: yo a tu edad tampoco pensaba en tener bebes, tranquila luego te llega el instinto maternal, ¡tener hijos es lo mejor que te puede pasar!, y yo asiento.
otros al enterarse con asombro que ya tengo 31, dan por sentado que ya no los tuve, entonces dicen: pero también es válido no tener, hay muchas parejas que ahora han resuelto no tener hijos.
Pues el tal instinto maternal aún no llega, la mayoría de mis amigas ya tienen hijos y yo mientras tanto, opté por decir: ¡cuando Dios quiera!
y la verdad he llegado a pensar muchas cosas, como que soy un ser malvado, egoísta que sólo pienso en mi, en mi bienestar, en mi cuerpo, en mi desarrollo profesional y en hacer muchas cosas que con un bebe a bordo pienso no serían imposibles, pero quizás si un poco más complejo, como estudiar, viajar, salir de rumba de improvisto a comer con amigas o simplemente dormir hasta tarde.
y la verdad he llegado a pensar muchas cosas, como que soy un ser malvado, egoísta que sólo pienso en mi, en mi bienestar, en mi cuerpo, en mi desarrollo profesional y en hacer muchas cosas que con un bebe a bordo pienso no serían imposibles, pero quizás si un poco más complejo, como estudiar, viajar, salir de rumba de improvisto a comer con amigas o simplemente dormir hasta tarde.
También he pensando que el tema sencillamente me aterra, desde la subida de peso, hasta lo más complejo que es la responsabilidad de criar un buen ser para la sociedad.
Mis amigas que tienen hijos dicen que es una experiencia maravillosa, que no me puedo quedar sin tener por lo menos un hijo, otras argumentan que dos, por aquello de la importancia de tener hermanos, que muchos dolores, enojos se compensan con un "mamá te amo", un beso o un "matacho" pintado en una tarjetica.
Realmente yo sigo disfrutando de dormir hasta tarde los fines de semana, o de hacer una siesta tranquilamente, de no tener que recoger juguetes, de no tener que preparar teteros, de no tener que preparar pañaleras cuando salimos de viaje, disfruto realizar compras para mi, sin tener que pensar que estoy dejando de comprar algo para un chiquitín.
Disfruto de planes que salen de imprevisto sin tener que pensar que tengo que ir a recoger chicos al colegio, quien me los cuida mientras tanto o que me están esperando en casa para cenar o hacer las tareas.
Disfruto de este momento y seguro si ya tuviera hijos también lo estuviera disfrutado, sólo deseo que cuando ese momento llegue, pueda disponer de la libertad financiera que me permita quedarme en casa al lado de los niños disfrutando de la etapa de ser mamá, pintando, jugando, bueno eso es lo que pienso ahora.
Así que ¿cuándo vendrán mis hijos?: cuando Dios quiera y punto!!
Y a ti que pregunta te hacen: ¿cuándo vas a encargar? o ¿y pa´cuándo la parejita?
domingo, 10 de mayo de 2015
Mamá con estilo seductor
Las mamás con estilo seductor se caracterizan por ser extrovertidas, alegres e incluso atrevidas.
Suelen llevar ropa ceñida, tacones muy altos, escotes, brillo, aberturas y no les incomoda que les miren.
Un excelente ejemplo de este estilo de mamá es la talentosa Colombiana Sofía Vergara, modelo, actriz y madre de Manolo González Vergara.
A sus 42 años goza de una hermosa figura tipo reloj de arena y una estrella en el paseo de la fama en Hollywood Boulevard.
Últimamente luce vestidos con largo a la rodilla, dejando ver su cuerpo de una manera muy sensual.
Si este es tu estilo, destaca tu mejor cualidad: pecho, cintura o piernas al mejor estilo de Sofía, ¡pero no todas a la vez!, cuida de no mostrar demasiado, pues la línea que separa lo sensual de lo vulgar es muy delgada.
Te sugerimos evitar:
Crop top + falda muy corta y ajustada |
Traje ceñido que deja ver escote y abdomen |
Crop top + shorts demasiado corto |
Vestido muy corto, ceñido y strapless |
domingo, 3 de mayo de 2015
6 Estilos de mamás
Algunas definiciones, según la Real Academia de la Lengua, estilo es "Modo, manera, forma de comportamiento". "Uso, práctica, costumbre, moda"
Y escuchamos todo el tiempo la palabra "estilo", en diferentes contextos.
Pues también hay estilos de mamás:
La ejecutiva: Aquella mujer que decidió no sacrificar su profesión por la maternidad o porque la situación económica así lo exige. Son aquellas mamás que dejan a sus bebes en casa, van a la oficina, atienden viajes de trabajo, se dividen entre reuniones de trabajo y reuniones que cita el colegio. Sus ojos en la casa se llaman “la nana” y se comunican con ella por lo menos tres veces al día para hacer seguimiento si sus hijos ya comieron, si les dejaron tarea, y controlan a distancia los dulces que pueden comer durante el día. Su look suele ser sofisticado, clásico y aveces seductor.
Mamá que siempre estaba en casa: este es el tipo de mamá que me tocó a mí. Es la mamá que siempre que llegué de la escuela estaba ahí para recibirme, atenta a escuchar mis historias, (y harto que si le hablaba), me servía el almuerzo, me contaba cuentos, incluso se los inventan para verme a mi y a mis hermanos con cara de emoción. Estilo natural, casual.
La estricta: Es el tipo de mamá que ama tanto a sus hijos que no desea que se salgan de su radar o de la burbuja que ha creado para que nada ni nadie les haga daño. Sabrás que tuviste una mamá estricta si te exigieron arreglar el cuarto, ayudar en la casa, te ganaste más de una salida a punta de lavar los platos durante la semana, y si te volaste para una minitk (en mi tiempo se llamaban así), la cantaleta y el castigo seguro fueron monumentales y por supuesto ningún ser era el ideal para ser tu amig@ y alguna vez le escuchaste la frase “ese muchach@ no me gusta”. De estilo clásico o preppy.
La preocupada: Se preocupaba porque no organizabas el uniforme, porque no hacías la tarea, porque del colegio le llegaban notas, porque pedías permiso para salir hasta las 11p.m y era la 1.am y no habías llegado, además te exigía que dejaras el número de teléfono de la casa del amiguit@ donde te ibas hacer la tarea. Pero cuando creciste: aún te empaca lonchera porque quizá en la oficina aguantas hambre, te ve muy flaca siempre, te ayuda a organizar el uniforme o ropa para ir al trabajo y cuando llegas a casa te sirve comida, te llama a la oficina para saber cómo estás y si ya almorzaste. Femeninas, dulces. Estampados florales, telas vaporosas y encajes acompañan su estilo.
La alcahueta: Las empijamadas siempre fueron en tu casa, fue esta mamá quien convenció a tu papá de dejarte tener tu primer novio, es la que te permitía invitar a todos tus compañeritos de clase a almorzar, tomar las onces o el “algo”, hacía o hace tu postre o comida preferida. Tienes 30 y todavía tus amigos te preguntan por ese plato que hacía tu mamá. Luce original, divertida, bohemia.
Imágenes tomadas de Internet |
Creo que independiente del estilo de madre que tengas o seas, hay una característica en común, y es el amor por su hijos, no soy madre aún, pero veo mujeres a mi alrededor que dan todo por su hijos independiente del “estilo”.
Todas son unas súper mamás, son historiadoras, chef, consejeras, diseñadoras de moda, chofer, organizadoras de eventos, calman dolores con una caricia o un abrazo y hasta ¡espantan monstruos!
Todas son unas súper mamás, son historiadoras, chef, consejeras, diseñadoras de moda, chofer, organizadoras de eventos, calman dolores con una caricia o un abrazo y hasta ¡espantan monstruos!
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